Violeta
Yangüela
Argentina
está en la competencia de los premios de las mejores películas. En realidad,
Argentina siempre ha sido una película con distintos capítulos.
Es
el único país del mundo que de pertenecer a la lista de los países más ricos
del mundo ha dejado de serlo. En el
siglo pasado ocupaba el cuarto lugar. También ha sido sacada de la lista de los
15 países que más aportan al Producto Bruto Interno mundial. (PBI)
En
términos políticos las Juntas Militares eran de tres. En 26 años, seis golpes
de estado. Si no es un record, evidentemente es un buen número. A los golpes le
pusieron un título. Salvación Nacional, Revolución Liberadora, Revolución
Argentina, y el más rocambolesco de todos, Proceso de Reorganización Nacional.
Y
se instala la Dinastía K. Néstor
Kirchner gana la presidencia en el 2003 y lo hereda su Evita, Cristina, llamada
la Reina. La película de la Ruta del Dinero K comienza.
El
que fuera secretario de Obas Públicas de los gobiernos K, José López, fue
atrapado “in fraganti” en el 2016 con 160 bultos cuando intentaba arrojarlos repletos
de dinero al otro lado del muro de un Convento de monjas de clausura. El
Convento fue allanado y se encontraron con tres bóvedas de hormigón bajo el
suelo del Convento.
Este
nuevo capítulo se titula Los Cuadernos.
Oscar
Centeno, chofer de Roberto Baratta, Secretario de Coordinación del Ministerio
de Planificación, el número dos del Ministro Julio De Vido, hizo apuntes
durante 10 años en ocho cuadernos. Cientos de viajes con bolsos cargados de
dinero producto de los sobornos de empresas que pagaban a cambio de contratos.
Los
cuadernos llegaron al periódico La Nación y luego fueron entregados al juez
Claudio Bonadio.
Horarios,
rutas, peso de las bolsas, nombres y empezaron las delaciones. Los empresarios
se declararon victimas de extorsión y muchos se acogerían a la “calidad de
arrepentidos” que otorga beneficios penales a cambio de confesión.
Por
supuesto, estas delaciones llegan hasta Cristina
Fernández de Kirchner Y su respuesta no ha podido faltar. Dice la ex Reina,
“los problemas judiciales que tengo son por haber afectado intereses económicos
muy poderosos que siempre tratan de obstruir las medidas que llevé adelante en
beneficio de las grandes mayorías populares”.
Acusa al juez Claudio Bonadio “de ser un brazo de persecución política
en una nueva estrategia regional para proscribir dirigentes que permitieron
salir de la pobreza a millones de personas”.
¿Se
creerá una Lula en Argentina?
Parecería
que a partir de los cuadernos de Centeno habría que recomendarles a los
políticos y empresarios que se cuiden de los choferes.
v.yanguela@codetel.net.do