Violeta
Yangüela
En
1951 se forma el Tratado que sería el comienzo de lo que hoy es la Unión
Europea. La Comunidad Europea del Carbón y del Acero con seis países que
intercambian las materias primas de la siderurgia como una manera de paliar la
debacle económica que dejaría la Segunda Guerra Mundial.
El
argumento económico fue el pilar de ese Tratado.
En
la actualidad 28 países conforman la Unión Europea, que aún incluye al Brexit
del Reino Unido, se encuentra en un
proceso de elecciones para su Parlamento europeo y en términos dominicanos la
mejor palabra para definir las apuestas electorales es “rebú”.
Al
parecer los partidos tradicionales que gobiernan, es decir, la derecha y la
izquierda han dejado de ser los protagonistas.
Ahora se definen otras corrientes, xenófobos, eurocépticos, derecha radical, centro derecha, la
ultraderecha, los verdes, populistas, en fin que tiene para escoger y otros son
los argumentos para la sostenibilidad de la Unión.
Previo
a la celebración de las elecciones Matteo Salvini organiza un acto en la Plaza
del Duomo en Milán junto a otros 10 líderes a los que llaman la ultraderecha
europea, con el objetivo de conquistar el Parlamento Europeo y “construir una
Europa de las naciones que ponga freno a la inmigración devuelva soberanía a
los Estados”.
Los
discursos de los representantes de los países congregados en Milán son una
expresión de los objetivos a lograr en el
Parlamento de la Unión Europea.
Dice
el holandés Geert Wilders “debemos defender nuestros Estados nacionales. Basta
con la inmigración y el islam”. La francesa Le Pen “ya no queremos esta oligarquía sin corazón que nos
dirige, Ya no queremos esta UE que hace soplar nefastos vientos de la
globalización salvaje”.
Por
supuesto el organizador del grupo, Matteo Salvini, cierra el acto y dice “el
templo de la democracia es el Parlamento Europeo y esperamos ser mayoría para
poder dejar en casa a la izquierda después de tantos años”. Termina diciendo “Europa no es Macron ni
Juncker, Europa es Leonardo Da Vinci”. Habría que decir que le quedó bonito.
Mientras
tanto Jean-Claude Juncker, el actual presidente de la Comisión Europea, escribe
en el periódico El País con un llamado a los europeos a votar en las elecciones
y una defensa de la unidad europea.
Dice
en su mensaje claro a los “populistas” “tenemos que combatir a los populistas
allí donde son débiles con acciones, no con palabras, con esperanza, no con
miedo, con unidad, no con división y con un plan claro para un futuro mejor, no
con nostalgia de un pasado que nunca existió”.
Termina diciendo, “Ese dia todos somos Europa”. Habría que decir que
también le quedó bonito.
Sin
ninguna duda, preparados para la pelea electoral.
v.yanguela@codetel.net.do