lunes, 28 de octubre de 2019

DON EVO


Violeta Yangüela
Sin ninguna duda Don Evo merece el mejor y mayor premio del universo.
El primer intento de llegar a la presidencia fue en el 2002 quedando en segundo  lugar. Participa de nuevo con su partido Movimiento al Socialismo (MAS) en las elecciones del 2005 y alcanza la presidencia con el 54% de los votos.
De nuevo participa en las elecciones del 2009 y logra la reelección con el 64% de los votos  y una tercera en el 2014.
Resulta que en el primer mandato de Don Evo se aprobó una nueva Constitución de Bolivia en la que se establece la no reelección por más de dos mandatos consecutivos.
Pero, y el pero siempre  aparece, en su participación para el tercer mandato se argumentó que su primer mandato no contaba porque no se correspondía con los principios constitucionales vigentes. 
Don Evo fue electo sin problemas.
En el 2016 se celebra un referéndum en el que se preguntaba si estaba de acuerdo con la reforma constitucional para permitir la reelección por dos veces de manera continua.  El No sumó 51% y el Si 48%.
O sea que Don Evo no podía ser candidato presidencial en las actuales elecciones.
¡Y salió el otro pero!
El Movimiento al Socialismo (MAS) presentó un recurso ante el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) de inconstitucionalidad contra la limitante a los mandatos consecutivos.
Según el magistrado del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) Macario Cortez, se decidió aplicar los “derechos políticos” por encima de los artículos de la Constitución que establece el límite de dos periodos consecutivos.
A pesar de las protestas y de las denuncias de fraude, El Tribunal Electoral ha confirmado la victoria de Don Evo en estas elecciones presidenciales.
Mientras tanto, Don Evo denuncia que está en proceso un golpe de estado que ha sido preparado por la derecha con apoyo desde el exterior y hace un llamado a los organismos internacionales a defender la democracia.
¿Y para qué escriben y aprueban una Constitución?
¿Y para qué realizan un referéndum?
¿Cuál democracia? ¿La democracia de Don Evo?
v.yanguela@codetel.net.do



lunes, 21 de octubre de 2019

PERÚ


Violeta Yangüela
En el reparto territorial del proceso de la independencia de Iberoamérica  se crearon los nuevos estados-naciones.  En cada pedazo de la repartición, a pesar del sueño de Simón Bolívar, se crearon nuevas repúblicas con un sistema político a semejanza de los Estados Unidos con la división de los tres poderes independientes en lo que se supone es un sistema democrático.
Parecería que en Iberoamérica la copia aún no termina de funcionar.
Los creadores de esas repúblicas han sido caudillos o dictadores que han gobernado a su antojo por años en diferentes países. Los ejemplos sobran. Todavía siguen y un buen ejemplo es Cuba.  Los Castro han sido los propietarios del país por más de medio siglo.
En Perú, en tiempos de Alberto Fujimori, se aprobó que el presidente pudiera disolver el Congreso. En Ecuador y por supuesto en Venezuela esa norma está avalada constitucionalmente.
El artículo 134 de la Constitución peruana aprobada en 1993, establece que si el Congreso niega su confianza a dos Consejos de Ministros, el presidente puede disolver el Congreso y convocar a nuevas elecciones.
El presidente Martin Vizcarra, luego de la negativa del Congreso a dos Consejos de Ministros, ejecutó la norma constitucional y las nuevas elecciones se celebran en el próximo mes de enero.
La oposición en el Congreso, liderada por Keiko Fujimori, determinó que Vizcarra no había cumplido con el debido proceso y declara vacante la presidencia.  O sea que supuestamente Vizcarra deja de ser presidente y el Congreso nombra a la vicepresidente Mercedes Aráoz como presidente.
Luego de un dia después de haber asumido como presidente interina Aráoz renuncia a la vicepresidencia y a la presidencia interina y dice que “no hay condiciones mínimas para ejercer el encargo que me dio el Congreso de la República. Se ha roto el orden Constitucional”.
El parlamentario Marco Arana presentó ante la Fiscalía una denuncia contra Aráoz por usurpación contrario a la Constitución y a la ley y Pedro Olaechea, presidente del Congreso,  ha presentado una demanda ante el Tribunal Constitucional para declarar nula la disolución del Parlamento y reabrirlo.
El Tribunal Constitucional anuncia que el 29 de octubre decidirá si admite a trámite la petición de Olaechea para que se evalúe si el presidente actuó de acuerdo a la Constitución.
¡Tremendo embrollo!
v.yanguela.@codetel.net.do